Hormigonado en tiempo caluroso
La EHE-08 en su artículo 71.5.3 habla sobre el hormigonado en condiciones climáticas especiales (en tiempo frío y en tiempo caluroso). El artículo 71.5.3.2 indica que:
“…se adoptarán las medidas oportunas para evitar la evaporación del agua de amasado, en particular durante el transporte del hormigón y para reducir la temperatura de la masa. Estas medidas deberán acentuarse para hormigones de resistencias altas.
Para ello los materiales constituyentes del hormigón y los encofrados o moldes destinados a recibirlo deberán estar protegidos del soleamiento.
Una vez efectuada la colocación del hormigón se protegerá éste del sol y especialmente del viento, para evitar que se deseque.
Si la temperatura ambiente es superior a 40ºC o hay un viento excesivo, se suspenderá el hormigonado, salvo que, previa autorización expresa de la Dirección Facultativa, se adopten medidas especiales.”
En la edición comentada de la EHE-08 se añaden indicaciones sobre que se considera tiempo caluroso:
“…debe entenderse por tiempo caluroso aquél en que se produzca cualquier combinación de altas temperaturas, baja humedad relativa y alta velocidad del viento, que tiendan a empeorar la calidad del hormigón o que puedan conferir propiedades no deseadas.”
“…debe tratarse de asegurar que la temperatura del hormigón en el momento del vertido sea inferior a 35ºC en el caso de estructuras normas”
Es conocido que las elevadas temperaturas del hormigón fresco aceleran el fraguado, aumentan la velocidad de hidratación del cemento y, como consecuencia, exigen mayor cantidad de agua. Este cúmulo de procesos terminan llevando a una resistencia final más baja. Además de aumentar la aparición de fisuras por la retracción plástica.
La conformidad del hormigón en obra se lleva a cabo mediante el ensayo de la resistencia a compresión. Dicho ensayo se realiza sobre las probetas de hormigón fabricadas por el laboratorio en la obra. Según el artículo 86.3.2 de la EHE-08:
“Una vez fabricadas las probetas, se mantendrán en el molde, convenientemente protegidas, durante al menos 16 horas y nunca más de tres días. Durante su permanencia en la obra no deberán ser golpeadas ni movidas de su posición y se mantendrán a resguardo del viento y del asoleo directo. En este período, la temperatura del aire alrededor de las probetas deberá estar comprendida entre los límites 15ºC-35ºC. En el caso de que puedan producirse en obra otras condiciones ambientales, el Constructor deberá habilitar un recinto en el que puedan mantenerse las referidas condiciones.”
¿Qué nos indican estos dos artículos?
Tanto los artículos como el comentario mencionado indican que en tiempo caluroso deben extremarse las precauciones tanto en el hormigonado como en la preparación y permanencia en obra de las probetas. Todos los implicados en el proceso de hormigonado y su control tienen sus obligaciones: la Planta de hormigón debe proveer hormigón con una temperatura inferior a 35ºC, el Constructor debe adoptar las medidas oportunas para evitar la excesiva evaporación del hormigón vertido y protegerlo del sol, así como habilitar un recinto para que pueden guardarse las probetas de las condiciones climatológicas y evitar ser movidas; la Dirección Facultativa debe suspender el hormigonado si la temperatura es superior a 40ºC o hay un excesivo viento y el Laboratorio debe fabricar las probetas acorde a las normas UNE correspondientes y en caso contrario registrar las condiciones que varían.
Posteriormente al hormigonado hay que poner especial atención en el curado del hormigón, de acuerdo con las instrucciones del artículo 71.6 de la EHE-08.